Cuando Villanelle mata a un coronel chino en una clínica de sadomasoquismo en Berlín, Eve y Bill viajan para investigar. Mientras tanto Villanelle disfruta de jugar al gato y al ratón.

Datos desde Berlín apuntan a la existencia de un espía, llevando a Eve a realizar su primera operación de vigilancia. Mientras tanto, envían a Villanelle a Inglaterra a eliminar a un miembro de la inteligencia británica.

Habiendo sobrevivido a un encuentro aterrador con Villanelle, Eve es sorprendida por ella en su casa. Eve tiene ahora al espía instalado en una casa segura y tiene la oportunidad de extraer información y descifrar todo esta cuestion.

Una asesina es llevada en custodia a Rusia y Eve y Carolyn se dirigen a Moscú para acceder a la prisión. Suponen que podría tener informacion sobre la organización que dirige a Villanelle. Mientras tanto, Villanelle es puesta en la misma prisión.